lunes, 28 de mayo de 2012

TARTA POCOYÓ II Y RECETA MADEIRA SPONGE CAKE

Esta entrada bien se podría titular "La maldición de Pocoyó, el niño azul", pero me lo he pensado mejor y la he dejado en plan más diplomático. Habréis visto que es la segunda tarta que hago de Pocoyó, y si habéis hecho bien los deberes y leído lo que escribí entonces, sabréis que fue una de esas tartas que se quedan para siempre en tus pesadillas más terroríficas. Parecía que todo iba a salir mal, in extremis la medio-arreglas y se te queda un cuerpo malo malo después de entregarla.

Pues sí, otra vez hago Pocoyó y otra vez me encuentro con todo tipo de contratiempos. Menos mal que esta vez era muchísimo menos arriesgada.

Yo soy una persona muy exigente con mi trabajo, no solamente con esto de la repostería, sino también en mi trabajo del día a día (el que me da las habichuelas y me financia esta pasión creativa, vamos). Por eso no soporto que me salga mal ni siquiera una tarta que me vaya a comer en la intimidad de mi hogar. Qué le vamos a hacer, si me gusta que las cosas salgan bonitas y ricas...

Cuando cubrí la tarta de ganaché, la igualé y la dejé lista para trabajar con el fondant pensé "qué perfecta estás, no me darás problemas". Pero ¿quién me iba a decir a mí que iba a ver cómo al cubrirla se moverían los discos de bizcocho y saldrían burbujas sin ton ni son? Me quedé fría. Pero como no iba sobrada de tiempo, reaccioné y sustituí el fondant. No es que quedara perfectísima, pero ya era más aceptable.

Y por hablar de otros problemas, diré que los modelados tipo relieve, como es el caso de esta tarta, tampoco fueron coser y cantar. Y mira que parecen sencillos, pero es que si quieres que se parezcan a los personajes reales, tienes que fijarte mucho en pequeños detalles y tratar de plasmarlos.

Por otro lado, tampoco quería hacer la tarta de siempre, con el nombre dentro de los cuadrados de colores básicos, o dentro de cubos de esos mismos colores... Quería una tarta sencilla, bonita y divertida. Pensé que el nombre imitando la cuerda del globo quedaría simpático, o el cabo de una de las cuerdas amarrado al rabito del perro... No es una tarta que pase a la historia, pero yo me quedé bastante satisfecha del trabajo realizado, sobre todo después de sudar tinta con el fondant.




Se trata de un bizcocho al aroma de cacao, relleno de ganaché de chocolate blanco y de chocolate con leche.
RECETA MADEIRA SPONGE CAKE (a mi manera)
Y ahora sí, vamos allá con la receta del bizcocho. Antes de empezar, me gustaría decir que, aunque algunos blogs hablan de este bizcocho como demasiado seco, a mí me encanta y de momento nadie me ha dicho que su tarta esté muy seca. Creo que a veces el problema somos nosotros y no el propio bizcocho, porque aunque sé que en algunos países no se suele bañar el bizcocho con almíbar, aquí es una tradición y estamos acostumbrados a esos pasteles jugosos y llenos de sabor, que parecen que nada tiene que ver con un bizcocho Madeira. Ahí está la cuestión, en acertar con el almíbar y saber la justa medida del calado del bizcocho, de forma que no se deshaga, pero que nos inunde el paladar de suavidad y de sabor. No hay bizcocho seco, os lo aseguro.
La mayor ventaja del Madeira Sponge Cake (en adelante MSC) es que tiene una enorme consistencia y aguanta lo que le echen. Se puede tornear, que para los que os iniciáis significa darle forma, tallarlo, para que tenga la forma que se le quiera dar. Si se deja un par de días envuelto en film, asienta muy bien sin perder su sabor, de forma que al cortarlo no se rompe y apenas desmigaja. Por no hablar de que soporta con estoicidad el peso del fondant y de la decoración, sin mostras nunca atisbos de debilidad.
En algún sitio leí que este bizcocho se hizo en Inglaterra para los desayunos, para mojar en la leche.


Ahora me dejo de más discursos y os dejo la receta que yo siempre hago y que no sé de dónde saqué (probablemente la saqué yo misma de tantas pruebas que hice siguiendo muchísimos blogs). Las cantidades están calculadas para un molde de 15 cm de diámetro y unos 10 cm de altura. Os aviso de que sale un bizcocho altísimo.


INGREDIENTES:


* 6 huevos
* 300 g de matequilla a temperatura ambiente
* 300 g de azúcar
* 450 g de harina normal
* 1 sobre de levadura Royal
* 1 cucharada de esencia (vainilla, cacao, azahar...)


PREPARACIÓN:


1º) Precalentar el horno a 180 ºC, encamisar el molde con mantequilla o con spray desmoldante.


2º) Se pesan todos los ingredientes para tenerlos listos y se tamiza la harina con la levadura.


3º) Batir la mantequilla con el azúcar hasta que se integren y haya aumentado un poco la masa. Si tu batidora es de poco potencia, es importante que antes de ponerla a trabajar en este punto, le ayudes integrando el azúcar en la mantequilla con el dorso de una cuchara.


4º) Se añaden de uno en uno los huevos, cuidando de que quede integrado uno antes de añadir otro.


5º) Es el momento de incorporar la esencia y batir de nuevo.


6º) Añadir poco a poco la harina con la levadura mientras que se sigue batiendo. Lo ideal para evitar luego burbujas, es que una vez que se haya puesto toda la harina, dejar que la batidora trabaje unos 4-5 minutos y asegurarse de que el azúcar no se haya quedado en el fondo del recipiente, removiendo de vez en cuando con la cuchara.


7º) Se pone en el horno durante una hora aproximadamente, pero eso depende del horno de cada cual, hay que ir controlando. Eso sí, no abráis el horno hasta que hayan pasado al menos 40-45 minutos, porque seguro que no estará y nos arriesgamos a que se venga abajo. Pasado ese tiempo, abrimos, pinchamos con un cuchillo largo o con un palito de brocheta y comprobamos. Si sale húmedo, lo dejamos unos 10 minutos antes de volver a comprobar.


8º) Una vez hecho, lo sacamos del horno. A los 5 minutos más o menos, lo podemos desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla. Si veis que tiene mucha joroba, podéis dejarlo al revés sobre la rejilla para que quede más estético.

Y a trabajar con él! Espero que os haya gustado. En la próxima entrada os hablaré de cómo calcular las cantidades para moldes de otras medidas y algún consejillo para la cocción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario